Jaén
Encontramos a Jaén entre olivos y con el espectacular fondo de Sierra Mágina en el suroeste de la provincia del mismo nombre.
Enclavada en una suave ladera, Jaén es la bella combinación de los tradicionales trazados urbanísticos árabes con los monumentales edificios del renacimiento.
Lo primero que llama la atención al divisar Jaén es el impresionante Castillo de Santa Catalina coronando a la antigua Yayyan, nombre con el que los árabes denominaban a Jaén.
Visita obligada su inmejorable ubicación hace de el un privilegiado mirador desde el que obtener las mejores vistas de la ciudad y su entorno.
El antigua Alcázar, convertido en la actualidad en un moderno y confortable Parador de Turismo conserva aún parte de su antiguo esplendor, con algunas torres y parte de la muralla que rodeaba a la ciudad.
Junto a este, el llamado Alcázar Nuevo, construido por Fernando III, que acoge actualmente el Centro de Interpretación del Castillo. Se conserva buena parte de él, con cinco torres y una impresionante Torre del Homenaje. Dentro de una de las Torres Albarranas encontraremos la Capilla de Santa Catalina.
En la parte izquierda del castillo tras un breve y bonito recorrido podemos ver una gran cruz que sin tener un gran valor artístico (se dice que hubo una anterior construida por Fernando III) tiene unas magníficas vistas de la ciudad.
En la ladera del Cerro de Santa Catalina, se sitúa el histórico barrio de La Magdalena, que pasa por ser el más antiguo de Jaén, y que posee un gran número de edificios civiles y religiosos de gran valor. Bajo dichos edificios se han ido encontrando desde principios del siglos XX restos arqueológicos de enorme importancia, de entre los cuales habría que resaltar los Baños Árabes que durante casi 500 años han estado bajo el Palacio de Villadompardo. Actualmente se pueden observar en todo su esplendor el vestíbulo de ingreso y las salas fría, templada y caliente. En el palacio de un gran valor arquitectónico se puede disfrutar de un bello patio renacentista, una monumental escalera que nos lleva al museo de Artes y Costumbres que se alberga en él, y a una curiosidad por ser el único centro que hay en España de este tipo, el Museo del Arte Naif.
Cercano al Palacio, el Convento de Santa Rita, donde podremos degustar las famosas yemas de Santa Úrsula, y en la Plaza de la Magdalena podremos contemplar la iglesia más antigua de la ciudad, que aún mantiene el patio de abluciones musulmán además de una valiosa colección romana.
Cercana también está la Fuente del Raudal de la Magdalena, famosa por ser la “morada del lagarto de Jaén”, famosa leyenda de la ciudad.
Caminando por la antigua Judería podremos ver el renacentista Real Convento de Santo Domingo, con sus hermosas pinturas al fresco, la Capilla de San Andrés o el Real Monasterio de Santa Clara, con una venerada imagen del siglo XVI del Cristo del Bambú.
Seguimos y encontraremos el Museo Provincial, con su importantísima colección de arte ibérico mayormente formado por las piezas encontradas en Porcuna en el Conjunto Escultórico de Cerrillo Blanco junto a las esculturas ibéricas del Santuario del Pajarillo en Huelma.
Dejamos atrás la Fuente de los Caños, la iglesia gótica de San Juan y la Torre del Concejo y nos adentramos en el corazón del centro histórico con su característico ambiente medieval y donde podremos contemplar la obra maestra del genial Andrés de Valdelvira, la Iglesia Catedral de la Sunción de la Virgen, que fue comparada por Alejandro Dumas en su libro De París a Cádiz, Viaje por España con la montaña cercana por su tamaña y grandeza arquitectónica.
En la misma plaza de la Catedral (Plaza de Santa María) podremos contemplar otros dos palacios, el Ayuntamiento y el Palacio Episcopal.
Si seguimos por la llamada Calle Llana (Calle Francisco Coello), con su casa señoriales, llegaremos hasta la Carrera de Jesús, donde podremos contemplar los restos de la muralla musulmana y el Torreón del Conde de Torralba, junto a otros edificios religiosos.
Durante el recorrido pasaremos por plazas como la Merced y San Bartolomé, con sus respectivas iglesias, y que suelen estar bastante concurridas debido a los numerosos bares y restaurantes que hay en ellas. Veremos bellos monumentos como la Fuente Nueva, el Arco de San Lorenzo o el Palacio del Capitán Quesada Ulloa.
Cercanas a la Plaza de la Audiencia encontramos las calles Muralla, Cerón y Maestra rodeando el conocido Arco del Consuelo. En esta zona encontraremos las tabernas más antiguas de la ciudad.
En la Plaza de la Constitución hallaremos dos edificios significativos de Jaén, el Palacio de los Vilches (siglo XVII) con unos bellos soportales renacentistas decorados con medallones y que es el último vestigio de la antigua Plaza Mayor o Plaza del Mercado y la Diputación Provincial.
Junto a la Puerta del Ángel, está la que fue la Iglesia de San Ildefonso lugar donde reposan los restos del gran genio del renacimiento español, el arquitecto Andrés de Vandelvira, que dejo buena muestras de su arte por toda la provincia pero especialmente en Jaén, Úbeda y Baeza.
Dentro del Templo encontramos a la patrona de la ciudad, la Virgen de la Capilla, además de un precioso Altar Mayor y unos magníficos retablos.
Ya por último en la Alameda disfrutaremos de otro monumento renacentista como es el Convento de Las Bernardas o la Plaza de Toros, mientras paseamos bajo su arbolado.
